El mensaje difundido por el mandatario apoya esta jornada nacional de protestas convocada por doce grupos de derecha y ultraderecha, como el Movimiento Brasil Conservador y el Movimiento Integralista, reforzando palabras de orden como «basta
» y «necesitamos cambiar a Brasil».
La verificación del vídeo y de la cuenta presidencial fue confirmada el miércoles por la columnista política del diario O Estado de São Paulo, Vera Magalhães, y volvió a agitar la política brasileña, adormecida por los carnavales, generando reacciones contra Bolsonaro, inclusive de pedidos de destitución.
La Orden de Abogados de Brasil (OAB), por ejemplo, reconoció en una nota, las bases para un juicio político contra el presidente al usar su móvil para atentar contra la democracia.
Sectores de la oposición, de todos los tintes políticos, criticaron al presidente y convocaron una reunión de emergencia en el Congreso para tratar el tema el miércoles.
El vídeo reproduce imágenes del atentado que Bolsonaro sufrió durante la campaña presidencial de 2018, cuando fue acuchillado en medio de un mitin. El guión que acompaña las imágenes dice: «Él (Bolsonaro) fue llamado a luchar por nosotros, compró la pelea por nosotros, desafió a los poderosos por nosotros, casi murió por nosotros, enfrenta a la izquierda sanguinaria y corrupta por nosotros, sufre calumnias y mentiras por hacer lo mejor para nosotros, él es nuestra única esperanza de días cada vez mejores, y necesita nuestro apoyo en las calles el día 15 de marzo».
El vídeo, que toca al fondo el himno nacional, convoca a la protesta y compara a Bolsonaro, que se llama Jair Messias, a «Jesús”. Destaca además, a cuatro generales importantes de su Gobierno, entre ellos, al vicepresidente Hamilton Mourão y al ministro de Seguridad Institucional, general Augusto Heleno, que ya acusó al Congreso de «chantaje».
«Los generales aguardan las órdenes del pueblo», dice uno de los mensajes del vídeo que está siendo visto como una especie de «autogolpe» por congresistas, incluso aliados y amigos de Bolsonaro.
Críticas de varios tintes
El presidente del Congreso, Rodrigo Maia, que cumple agenda oficial en España, declaró en su cuenta Twitter: «Sólo la democracia es capaz de absorber sin violencia las diferencias de la sociedad y unir a Nación por el diálogo. Por encima de todo y de todos, está el respeto a las instituciones democráticas», escribió parafraseando a Bolsonaro, sin mencionarlo. El lema de Bolsonaro en su campaña fue «Dios por encima de todos».
Entre los políticos que criticó la manifestación presidencial, se destacaron los exmandatarios Fernando Henrique Cardoso (1995-2003), que apoya la política económica de Bolsonaro, y Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), su principal opositor.
El ex presidente Cardoso dijo que Brasil está «ante una crisis institucional de consecuencias gravísimas», mientras Lula da Silva, apuntó el «gesto autoritario de alguien que agrede a la democracia todos los días».
El abogado y excandidato presidencial Ciro Gomes, que enfrentó a Bolsonaro en las elecciones, declaró que es «un crimen» pronunciarse desde la presidencia contra las instituciones democráticas. Jueces de la Corte Suprema también criticaron el mensaje presidencial.