En una viñeta, dos jóvenes con ropas oscuras meten en el maletero de un taxi unos bidones con sustancias peligrosas e inflamables. Pero el taxista los ve y, en la siguiente viñeta, cumple con su deber: ¡Denunciados! Luego, un supuesto terrorista, que no se corta un pelo quizás por el gorro de lana que le cubre la cabeza, busca armas en su ‘tablet’ en una cafetería. Pero la camarera se da cuenta y también cumple con su obligación ciudadana: ¡Denunciado! A continuación, un repartidor de pizzas descubre nervioso, como revela la gota de sudor que le cae por la frente, que la persona que le abre la puerta para recoger el pedido está preparando algo sospechoso en el interior de… Ver Más